domingo, 1 de abril de 2012
La soledad de los números primos.
Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Mattia. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio. Fabio.
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Mattia y Alice.
ResponderEliminarDebe de se el día de los axiomas imposibles.
ResponderEliminarese libro en la mesilla de mi hogar, en una esquina lo dejo mi madre, pasaba y pasaba pero nunca lo cogí...me pregunto
ResponderEliminarme ha enganchado de principio a fin. En las últimas líneas leía "anfibio, anfibio, anfibio..."
ResponderEliminarUn buen trabajo.
ResponderEliminarUn beso.
Soy el Capi.
ResponderEliminarHoy me haré abstemio.
ResponderEliminar¿Ajá?
ResponderEliminarUn pulido trabajo, sí.
ResponderEliminarUn abrazo de Banner y Flappy.
Vaya, vaya, ahora discípula de E. E. Cummings y compañía. Menos mal que al menos es menos dramático. Aventuraré el reconcomio de la fuidez de pensamientos incontrolada como tema bajo el simbolismo estilístico modernista; pero tal vez me equivoque, nuca se sabe con los modernistas...
ResponderEliminar"mi dulce vieja etcétera
mi dulce vieja etcétera
tía lucy durante la última
guerra podía y lo que es
más lograba contarte con exactitud
por qué razón luchaba todo el
mundo,
mi hermana
isabel tejió cientos
(y
cientos) de calcetines sin
mencionar las camisetas a prueba de pulgas las orejeras
etcétera muñequeras etcétera,mi
madre esperaba que
yo muriera etcétera
valientemente por supuesto mi padre solía
quedarse ronco hablando de cómo era
un privilegio y si sólo él
pudiera entretanto yo
mismo etcétera yacía hundido
en el lodazal et
cétera
(soñando
et
….cétera,con
Tu sonrisa
ojos rodillas y tu etcétera)"
E.E. Cummings
Meredith